jueves, 5 de marzo de 2015

El poeta y su estilo (reflexión a partir de la muerte de Arnaldo Calveyra)


Arnaldo Calveyra (Mansilla, Entre Ríos, 1929- París, 2015)

El 15 de enero pasado murió en París  (donde vivía desde 1961) el decano de los poetas expatriados argentinos en países alófonos, Arnaldo Calveyra. Como los poemas quedan, se pueden encontrar varios de sus textos en numerosos espacios de la Red, entre ellos el blog de Arturo Borra y el sitio web dedicado a los autores de Concordia, que contiene además entrevistas y videos.

Se puede leer también un artículo de Silvina Friera publicada en Página/12 en ocasión de la muerte del autor. Como no podía ser de otra manera, en la nota hay reflexiones sobre la lengua como materia prima de la producción poética, y que como tal condiciona la obra que surgirá a partir de ella. Así, se cita la visión de Calveyra de la propia lengua madre como “una corriente de agua que está todo el tiempo vibrando y corriendo”, así como su opinión del idioma francés como “muy estático y asertivo”, y también se menciona que su traductora le decía que era un poeta "difícil de traducir".

Las dos primeras citas son posiciones personales sobre algo tan ídem como la percepción estética de una o más lenguas de parte de un hablante/ practicante, y como tal inopinables más allá del "para mí también/ para mí no". La tercera, sin embargo ("poeta difícil de traducir"), se trata de una apreciación profesional, y como tal sujeta a discusión. No perdemos de vista que se trata de un comentario indirecto en un contexto informal, pero hecha la salvedad lo discutimos, empezando por la idea de que haya poetas difíciles de traducir y otros que no. Hay por supuesto poemas más fáciles que otros, pero ¿poetas difíciles en sí?

Si cada poeta tiene un estilo (y cada poeta TIENE un estilo, si no no es poeta ni escritor), traducirlo es traducir ese estilo, algo que por definición no puede ser fácil, ya que implica un trabajo. Y después cabría pensar si esa dificultad, de existir, es una virtud o no (nada más difícil de traducir, por otro lado, que un mal texto, ya que requiere una corrección previa). Resulta más que probable que el comentario apuntara a enfatizar el carácter singular del estilo en cuestión, obviamente un elogio. Pero cabe la aclaración para evitar confusiones o establecer una relación directa "dificultad- calidad". A veces (tampoco es una regla)  la traducción de un texto puede resultar relativamente sencilla por su gran claridad. Por supuesto. hablamos, de poesía, y ningún rasgo estético es bueno o malo por sí solo, si no sólo en el contexto de ese panorama que conforma el estilo construido.

El artículo incluye otras citas de Calveyra, como cuando dice que “Poema es, ante todo, poder contemplar a través de la lengua”. Muy probablemente, una gran cantidad de poetas concuerde. Y es que el poema efectivamente ilumina algo bajo el prisma de la voz poética, como un cristal coloreado que nos hace ver las cosas (y la lengua) de otra manera. No es que eso no esté presente en los relatos (muy al contrario, ya que ese voyeurismo de otras miradas sea probablemente lo propio de la literatura), pero se magnifica ante la ausencia o la no centralidad del componente narrativo.

Hasta aquí el comentario. Ahora, si quiere, vaya y lea a Calveyra, y ríase de la muerte.

4 comentarios:

Unknown dijo...

Apreciado comandante:
con algún retraso pero, igual, con sensación de charla acorde leí la nota sobre la poesía de Arnaldo Calveyra. Quería expresar dos coincidencias, en especial: con la toma de esa cita que elige de la poesía su "poder contemplar a través de la lengua" y con la puesta en fase de ese contemplar con las (opuestas) opciones por un acatamiento permanente de la obligación de centralizar el componente narrativo.
En esos campos de conflicto, tal vez pasemos hoy por un momento de mayor apertura que la de otros anteriores. Nadie parece animarse del todo, hoy, a cerrar así nomás el sentido. Como si se nos exigiera la demostración de que no dejamos de aprender a hablar o a pensar.

Comandante Cansado dijo...

Gracias por el comentario. ¿Podría desarrollar el último párrafo, que no me quedó claro?

Anónimo dijo...

Tal vez no estuviera muy seguro de poder decir lo que decía... Ese "poder contemplar a través de la lengua" (sin obligarla a cerrarse a cada paso para cumplir con las servidumbres del relato...) hoy es casi de todos, sólo que muchos lo soportan, no lo quieren, y siguen tratando de cerrar construcciones narrativas absolutas en las que el tiempo dejó de creer. El problema es que a uno le ocurre parecerse a esos muchos en cualquier momento y sin darse cuenta. Yo quería escribir esto con levedad y gracia y me salió así, comandante, como en prosa de relato pedagógico.

Comandante Cansado dijo...

Ahora sí entendí, y me gustó :).